Facebook se vio envuelto en una polémica hace poco debido a que la plataforma fue utilizada como medio para generar miles de cuentas falsas que, a su vez, distribuyeron fake news. El alcance que tiene Facebook fue lo que convirtió a las fake news en algo relevante, especialmente porque estaban diseñadas para manipular la decisión de las personas durante las elecciones de Estados Unidos en 2016 y crear una postura sobre ciertos asuntos étnicos.

Esto no sólo daña la imagen de la red social, sino que afecta de forma significativa a una gran parte de la población mundial al manipularla y por eso decidió tomar ciertas medidas para combatir las fake news y a quienes las generan:

A través de una vigilancia minuciosa se detectan y eliminan cuentas y contenido que infrinjan las normas comunitarias y las políticas de publicidad que tiene establecida la plataforma.
No permiten que las fake news y contenidos inauténticos, como que los clickbaits, se distribuyan, lo que reduce su alcance.
Mantienen informados a los usuarios, de modo que éstos (y la gente en general) tengan más contexto sobre las publicaciones que ven.

Controlar en su totalidad las fake news es prácticamente imposible, pero con estas medidas Facebook garantiza que al menos hay un freno en el alcance y muestra su disposición por combatirlas.